El
comienzo de la campaña de 1965 para Jim Clark seria en agonía, a pesar de ganar
con relativa facilidad en East London (Sud Africa), Clark había sufrido una
lesión de espalda mientras estaba en Italia días antes, apenas terminada la
carrera en suelo africano, realizaría el largo vuelo hacia Australia y a Nueva
Zelandia, donde comenzaba a disputar la Serie Tasman, a la semana siguiente a
bordo del Lotus 32B.
La
popular serie Tasman, era un evento de ocho carreras, comenzando en Pukekohe,
entonces haciendo en parte de mecánico con Ray Parsons, bajando y subiendo los
coches, midiendo las presiones, cambiando piezas o lo que fuera necesario, los
triunfos en Levin, Wigram, Teretonga, Warwick Farm y Lakeside le dieron la
corona, sin embargo Clark no tuvo demasiado tiempo para celebrar, a la semana
siguiente se encontraba en Brands Hatch para
disputar la Race of Champions, ganando la primera carrera y compitiendo también
con un Lotus Cortina, al siguiente fin de semana, un Lotus 30 Mk2 le esperaba
en Silverstone, donde se haría de pole y el triunfo en la lluvia.
Luego
de Silverstone, Clark se dirigiría a
Miami para participar en la carrera de apoyo a las 12 horas de Sebring con un
Lotus Cortina, apenas conseguido el triunfo retornaba a Europa donde le
esperaba una carrera en Siracusa, un evento fuera del campeonato de f1, a pesar
de problemas de motor, lograría hacerse con la victoria, un Lotus 35 ya le
esperaba en Snetterton al igual que un Cortina, la siguiente semana seria de
tres carreras en Goodwood, una con el Lotus 30, otra a bordo del Cortina y
finalmente en el 33 f1, al final del fin de semana Jim Clark elevaba los
trofeos de ganador en cada evento, para mediados de abril de 1965, el escoces
volador llevaba 18 victorias en la temporada.
Su vida
se limitaba a viajes y carreras, algún día de paso por el apartamento que compartía
con Jackie Stewart, pero poco para relajarse o descansar, dos días después de
Goodwood viajaba a Pau para una carrera de f2 donde ganaría y de nuevo a
Inglaterra para Oulton Park en el Lotus 30 deportivo, luego de 19 victorias en
cuatro meses, el próximo evento seria las 500 millas de Indianápolis, algo que
significaría una especie de descanso debido a las requeridas pruebas en
preparación, clasificando segundo entre A.J.Foyt y Dan Gurney.
Jim
Clark se convertía en el primer extranjero desde 1916 en ganar el evento, el
primero en hacerlo con un coche con motor trasero y en hacerlo a un promedio de
242 kph, liderando por 190 de las 200 vueltas, delante de Parnelli Jones y el
debutante Mario Andretti, luego de hablar con su amigo Hugh Dibley quien competía
en coches deportivos y pilotaba para BOAC, Clark adquirió un Piper Twin PA-24-250
Comanche, con miras a tratar de hacer su
agitada vida algo más controlable, no pudiendo arreglar algunos inconvenientes
de calendario que afectaban a ambos, se pidió que la fábrica Piper entregara al
Comanche en Inglaterra, el avión partió de Boston pero nunca llego a
Inglaterra, desapareciendo sobre el Atlántico y finalmente Clark consiguió otro
por medio de Jack Brabham.
El
resto de 1965 fue una continuación de su caótico calendario, 29 victorias en total,
la corona de la f1 con victorias en Spa-Francorchamps, Zandvoort, Clermont
Ferrand, Silverstone y Nurburgring, se sumaban a las numerosas victorias en f2,
sport cars y la serie Tasman, el talento del escoces al volante de numerosos
vehículos hablaba por sí solo.
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