Lorenzo Bandini, Zeltweg 1964

Incluso antes de comenzar, la opinión general entre pilotos y mecánicos era que sería una Carrera dura, no por el trazado que también recibía su crítica, pero por la naturaleza de la superficie que había creado caos en las practicas, la gran mayoría de los participantes anticipaban un gran número de abandonos por problemas mecánicos, Clark, Siffert, Amon y Gurney entre las varias víctimas que habían sufrido problemas que en muchos casos predecían que se repetirían durante la carrera.

Apenas caída la bandera de largada comenzarían los problemas, Graham Hill y Jim Clark tendrían malas largadas dejándolos en 11 y 12 en la primera vuelta, Brabham sería el primero en encontrar problemas mecánicos con solo una vuelta completa, retornaría al circuito pero volvería a detenerse en varias ocasiones, Gurney tomaría  la punta en la primera vuelta con John Surtees siguiéndole de cerca, el piloto ingles lograría adelantar a Gurney rápidamente para colocarse al frente, Graham Hill no podría mejorar su posición en el campeonato después de abandonar con problemas mecánicos al completar tan solo cinco de las 105 vueltas pactadas, Jim Clark con una mala largada que le dejaría en la posición 11 comenzaba a recuperarse,  Surtees debía abandonar con problemas en la vuelta 8 y Gurney tomaría el liderato de la carrera seguido de Bandini, el Lotus de Clark seguía acercándose a la Ferrari de Bandini con Bruce McLaren detrás,  Clark finalmente conseguiría colocarse segundo con 12 segundos de distancia con Gurney en la vuelta 25, pero eventualmente problemas en su coche le forzarían a abandonar en la vuelta 40, poco después Bruce McLaren debía abandonar con problemas mecánicos que ya afectaban a gran parte de los coches, dejando al margen de la carrera a la gran mayoría de los prominentes nombres.

Dan Gurney se encontraba con una ventaja sobre Bandini y Ginther, por momentos los pilotos parecían tomar extremas precauciones en secciones del circuito donde los baches parecían no tener piedad sobre los bólidos, Gurney finalmente debió ceder su posición, abandonando con una rotura en el chasis poco antes de la mitad de la carrera, para cuando se llegó al punto medio del evento, Bandini lideraba sobre Ginther con Bonnier, Ireland y Hailwood siguiéndoles en la distancia, para muchos era evidente que la carrera seria ganada con suerte y mucha precaución, la superficie del circuito era tal que quedaban pocos lugares para colocar los numerosos abandonos, que en su mayoría se debían a roturas en la suspensión.

Bandini no perdería el liderato y asi conseguiría una victoria en un gran premio que fue demoledor para los coches, el piloto italiano ganaba la carrera con un tiempo de poco más de dos horas para completar los 336 kms de distancia, Ginther arribaba en segundo lugar a seis segundos y el tercer puesto seria para Bob Anderson en su Brabham a tres vueltas del ganador, Maggs, Ireland y Bonnier completaban los seis primeros puestos.