El gran
premio de Estados Unidos es el evento que más circuitos uso durante su historia
en el campeonato de fórmula 1; El primer gran premio se disputo en 1959,
utilizando el circuito de Sebring en Florida, el mismo había probado ser
popular en las carreras de coches deportivos, aunque existía una cierta
reservación en si sus pistas con numerosos baches, serian algo que los coches
de fórmula 1 adoptarían, en ese 1959 Bruce McLaren se haría con el triunfo,
mientras que Jack Brabham conseguía el título luego de quedarse sin combustible
en la última vuelta, debiendo empujar su coche hasta cruzar la línea en cuarta
posición asegurando así su primer título, ambos manejando para Cooper quien conseguía
también su primer título como constructor, el circuito sin embargo, carecía del
ambiente que la fórmula 1 consideraba adecuado y su trazado más acorde con los
coches deportivos que los de grandes premios.
Para la
siguiente temporada se consideraba necesario un cambio, por lo que se decidió el
probar en otra localidad, esta vez seria
en la costa Oeste del país, en Riverside, California, donde el circuito generaba más entusiasmo en
su trazado, pero poseía algunos inconvenientes que finalmente le convirtieron
en huésped por tan solo esa ocasión en 1960, Stirling Moss sería el triunfador
en esa ocasión en un Lotus, el circuito continuo
su uso en numerosas categorías, mostrando ser popular, pero la fórmula 1 no volvería
a girar sobre él.
Cameron
Argetsinger tenía la idea de revivir las carreras en la zona norte de Nueva
York poco después que había finalizado la guerra, en 1948 conseguía un acuerdo con el SCCA para
organizar eventos de coches deportivos en Watkins Glen, en principio con un
trazado de 10 kms, con la carrera atravesando
la ciudad, en 1952 un incidente en donde un espectador resultaría muerto
y varios otros lastimados, propulso cambios, el circuito seria reducido a 7 kms, con
planes de un nuevo diseño que le daría el trazado más conocido para mediados de
la década, con eventos nacionales e internacionales en aumento para fines de
los años 50, el circuito ya poseía de una diversa agenda, que le situaba en una buena posición para en
un cercano futuro, ser el hogar del gran premio de Estados Unidos.
El
reconocido trazado se comenzó a usar en la fórmula 1 en 1961, permaneciendo sin
alteraciones hasta 1970 cuando se comenzó a contemplar la adición del “Boot”
para 1971, siguiendo en el calendario hasta 1980, el corto trazado dejaba en
evidencia la necesidad de modificarlo, en particular con vistas a organizar
eventos de resistencia, hacia mediados de la década de los 70 se comenzaba a
contemplar el incluir algún circuito callejero y teniendo en cuenta la amplitud
de Estados Unidos, se trabajó para incluir uno en las calles de la costa oeste,
retornando al estado de California, donde
previamente se había utilizado Riverside, esta vez en la localidad de Long
Beach, uniéndose al calendario en 1976 y permaneciendo en la localidad hasta
1983, para fines de 1980 Watkins Glen quedaría de lado y otro circuito urbano
seria propuesto en Las Vegas, malamente organizado en una localidad poco práctica,
el circuito no tendría de gran apoyo y se comenzaría una serie de distintas
propuestas como Detroit, Dallas, Phoenix, la gran parte no siendo considerados
como soluciones ideales o permanentes.
Aparentemente el Gran Premio de Estados Unidos
parecía caer en desgracia, otro circuito en las calles de Phoenix no mostraría
ser ideal, cancelándose antes de la temporada de 1992 y no sería hasta el año
2000, luego de numerosos intentos, que la fórmula 1 retornaría al suelo
americano, esta vez en un lugar que parecía conectar en todo sentido, Indianápolis,
con parte del ovalo incluido en el trazado, luego de varios eventos, el evento
encontró un punto crítico en 2005, los problemas de los neumáticos Michelin
convirtieron a la carrera en un fiasco que prácticamente sello para mal el
futuro del evento, en 2007 sería la última vez que se utilizaría y nuevamente
Estados Unidos se quedaba sin un gran premio.
Luego
de varios rumores que ponían la carrera a retornar a las calles de Nueva York o
New Jersey en varias localidades, en mayo de 2010 se anunciaría que Austin, en
el estado de Texas construiría un circuito al cual la fórmula 1 llegaría en
2012 con un contrato por 10 años, pero incluso desde el comienzo, el circuito
mostro llevar consigo una nube sobre sus posibilidades de mantener la carrera
por ese tiempo, los rumores comenzaron a
circular nuevamente de que posiblemente Las Vegas estuviera considerando el
construir o modificar algún escenario para poder llevar la fórmula 1, aunque
siguen de alguna forma los planes de tratar de encontrar una segunda localidad,
pero idealmente una en cada costa para no interferir entre si o limitarse su
potencial, lo que sería poco práctico si
Las Vegas realmente construyera un circuito, dada la cercanía con Texas.
Los
equipos y la formula 1 en general considera que el mercado americano es muy
importante desde varios puntos de vistas, también le consideran un país lo
suficientemente grande en territorio y extensión como para poder realizar dos
eventos, manteniéndose una distancia prudente entre ambos, pero en muchos de
los casos o propuestas, no parece haber demasiada planificación en buscar un sitio
ideal para las carreras, con el retorno de México al calendario, el futuro de
Austin queda en el aire, ya que se considera que mucho del publico provenía
desde México y que la propuesta de este país podría significar dificultades
para el circuito de Texas, por lo que el gran premio americano sigue aun con
una nube de sospecha de donde seguirá o si será capaz de finalmente encontrar
una localidad que permita conseguir el éxito que tanto se busca.
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