Otros sin duda
nacieron con mas talento, para Brabham desde un comienzo, sabía que el debía de
construir su futuro, dedico mucho esfuerzo a conseguir sus objetivos, lo que
algunos poseían en estilismo, Brabham lo poseía en tenacidad, el más que nadie entendió
rápidamente que el suceso no está ligado exclusivamente al talento, sino al
esfuerzo, dedicación y tenacidad, pero esas largas noches en el taller
afectaban en muchos momentos su actuación en pista, al igual que Surtees , posiblemente
habría conseguido más si se hubiera contentado con tan solo manejar, para este
tipo de piloto, el construir el coche, formar el equipo era parte de su
concepto de que eran las carreras de coches.
El error que
muchas veces se comete es considerar a estos multi talento, con esa tenacidad
para llevar adelante sus ideas, como simples trabajadores de la f1, nada más
alejado de la realidad, su talento estaba latente, pero era parcialmente
cultivado, no vivían de su talento, se
forjaron su camino, ganándose su lugar, cada recompensa que recibieron, era el
fruto de ese trabajo.
En 1966 recibía
su OBE de parte de la reina Elizabeth II en el palacio de Buckinham, a la
salida , su coche se negó a arrancar, Jack Brabham se quitó el sombrero,
chaqueta, remango la camisa y se puso a
arreglar su coche ante la mirada de los guardias del palacio, un simple mecánico
de Sydney como él lo decía, un simple mecánico que llego a conseguir lo
impensable, 3 títulos del mundo y uno de ellos en el coche con su nombre.
Hoy en esta
despedida , levantamos nuestras copas y te saludamos Jack, te damos gracias por
lo que nos dejaste en las páginas del deporte y en el corazón de todos los fanáticos
de las carreras, como piloto fuiste el duro, el competidor que hacía que los demás
se ganaran su lugar en la pista, pero siempre respetuoso, todo un caballero y
eso te gano el respeto de todos tus rivales, admiradores en todo el mundo, hoy
no decimos adiós, decimos gracias por las memorias y que descanses en paz,
hasta siempre Sir Jack.
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