Muchos
pilotos reconocen que parte de su sueño en la f1 aparte de ser campeón, es
manejar para la legendaria escudería Ferrari y Sebastián Vettel no fue la
excepción, pero muchos dudaban de las posibilidades de que esto se produjera,
con un Alonso muy determinado a permanecer en el equipo y un Vettel que
conseguía cuatro títulos consecutivos en lo que parecía un ambiente ideal, pero
llego el 2014, nuevas reglas que cambiaron la naturaleza de los coches y en
ambos equipos comenzó a verse frustración, descontento y poco a poco, apareció
una leve posibilidad que los cambios estaban en el aire.
Para
Fernando Alonso fue una temporada complicada, varias campañas peleando con
coches mediocres, el bólido mostrando su mejor forma en China, cuando Matiacci
se integraba al equipo en el primero de muchos cambios, el nuevo director nunca
tuvo una tarea sencilla en sus manos, el equipo perdía competitividad y su
labor estaba más cerca de ser administrativa, eliminando redundancias y
concretando líneas de trabajo más eficientes, que de ser el director deportivo
que nunca pudo llegar a ser, sin embargo para Barcelona el rumor decía que la
scuderia tenía todo en línea para conseguir los servicios de Adrian Newey, tan
solo se precisaba de que este estampara su firma en el contrato, la historia de
alguna forma salió a luz, aparecieron algunas muestras de la política interna
de Ferrari y el sueño se esfumo, el diseñador no es muy partidario de embrollos
políticos, la relación con Ferrari siempre sería muy tensa desde ese punto de
vista, pero el equipo expresaba muestras de cambios que parecían favorables,
luego del esfume del sueño posiblemente, Fernando también comenzó a dar una
ojeada a su vida fuera de los coches rojos con más nitidez.
En el
equipo Red Bull había tensión y frustración en el aire también, cuatro títulos
para Vettel habían pasado factura, el nivel de esfuerzo, dedicación y desgaste
era notable, por más sencillo que pareciera por momentos, el estar al frente
continuamente conlleva un desgaste a varios niveles, es una situación que se
repite en todos los casos que repetir el conseguir la corona se observa ,
aunque sean en niveles distintos o circunstancias diferentes, las demandas van
en aumento y se exige a todo el personal.
Los
nuevos coches de 2014 fueron un reto para todos, nuevos sistemas sumamente
complicados y que varios se encontraron en desventaja desde un principio, no
ayudaron a la situación de estos, Red Bull integraba a un nuevo prospecto en
Daniel Ricciardo, para muchos su velocidad era conocida pero no parecía nada
muy especial, sin embargo el equipo Red Bull seguía su desarrollo con cuidado y
le selecciono para hacer de compañero de Vettel, desde el principio Vettel
pareció haber perdido la magia, su ventaja, pareciendo incapaz de hacer que los
nuevos bólidos respondieran a su gusto, la conclusión parecía ser que Vettel
había sido el piloto perfecto para un tipo de coches, un hombre especifico a un
estilo de coches salidos del genio de Newey, pero incluso pilotos como Raikkonen
parecían sufrir de similares problemas, en el caso de Vettel el que Ricciardo
pareciera hacer a placer sobre los nuevos bólidos no ayudaba y en cada retorno
al garaje la constante sonrisa de Ricciardo posiblemente le ayudo a convencerse
que era el momento de cambiar de aires y buscar un nuevo reto .
A su
llegada a Ferrari, Vettel parece un nuevo hombre, dispuesto a trabajar en
recuperar la confianza, pero debe hacerlo en una situación que no es ideal en
algunos aspectos, los cambios en Ferrari han sido profundos, aunque
posiblemente más que necesarios y para mejor, pero también se podría decir que
visto lo sucedido en la temporada pasada, Ferrari con todos los cambios
realizados, ahora esta comandada por dos capaces numero 2 como pilotos, pero
esto sería solo querer mirar los defectos y no ver que dentro de todo, la
scuderia tomo decisiones duras y contundentes que le permitirán retornar al
triunfo, aunque no será algo rápido, el muy capaz James Allison es una pieza
fundamental en esta nueva etapa, con departamentos mejor preparados y este con
mayor control sobre el diseño, es posible que Ferrari muestre un muy
contundente paso hacia adelante en 2015 con espacio a mejorar de forma lógica y
determinada.
Ambos
pilotos tiene mucho que probar en este nuevo campeonato, pero también es justo
decir que dado el talento que ambos poseen, es casi seguro que al menos se
muevan en una dirección más positiva de lo que lo hicieron en la pasada
temporada, ambos poseen una muy buena relación fuera de pista y esto es un factor
que puede ayudar a todo el equipo a concentrar esfuerzos hacia un solo punto en
común, Ferrari realizo un enorme número de cambios que llevaran algo de tiempo
en asumir, pero en general la gran mayoría eran necesarios, tanto el equipo
como los pilotos saben que las cosas deben mejorar, pero depende de ellos en
que la colaboración de frutos, para los equipos que están tratando de alcanzar
el nivel de Mercedes, significa un enorme esfuerzo, solo el tiempo dirá si los
pasos tomados hasta el momento son los ideales, luego de cuatro títulos
seguidos por una temporada mediocre, Vettel tendrá toda la motivación que
precisa para demostrar que es capaz de pelear por la corona.
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