jueves, 30 de abril de 2015

Frenando la caida



Un dicho popular proclama que en tiempos desesperados, desesperadas medidas son necesarias, esta es una clara descripción de la situación de la f1 y una que refleja que a veces en esa desesperación se adoptan medidas que poco ayudan o simplemente son una solución artificial y momentánea que se transforma como algo permanente, que no soluciona nada y genera otros problemas.

La gran mayoría de los problemas de la fórmula 1 están anclados en modelos económicos y planeamiento de eventos que son antiguos, reflejan poco de la cultura actual y como el mundo consume, observa o se involucra, los problemas financieros que aquejan como el deporte es organizado y como se dividen sus ganancias solo agudizan la situación, los famosos bonus que algunos reciben o que se distribuyen con poca contemplación por los demás, siguen creando enormes disparidades en algo en que todos los actores son necesarios para poder ofrecer un show que sea atractivo y de ahí se ramifican muchos otros problemas que llevan a la caída de interés en la f1 de un 30% y creciendo, en los últimos 5 años.

En Malasia, Bernie Ecclestone se reunió con los directores de equipos para hacer una propuesta o más bien un pedido, que todos pusieran sobre la mesa ideas de cómo mejorar el show, sin contemplaciones de si eran viables o no, el objetivo es tener cuantas más ideas sean posible y luego crear un plan que incluya lo que para todos sea necesario para mejorar audiencias, espectáculo y de paso las ganancias.

La caída de interés en las audiencias y espectadores en los eventos afectan al deporte en muchas formas, los auspiciantes no ven el retorno por su inversión y esto lleva a una falta de interés en involucrarse en lo que muchos ya consideran algo demasiado caro y exclusivo, esto también afecta que los que aún están dispuestos a formar parte del show no estén dispuestos a ofrecer las cantidades astronómicas del pasado  y esto afecta directamente la economía de los equipos o su capacidad de producción, respuesta , desarrollo; La situación de varios de los competidores es ya conocida, pero una que se sigue obviando desde la cúpula superior, que parece seguir empeñada en solo mirar por los intereses de unos pocos, a pesar de que es preocupante ver una grilla como Melbourne, donde quedaba en evidencia que de no reaccionarse a esta situación, hay peligro de perder el poco control que aún queda en el deporte.

En principio del encuentro en Malasia se sacaron algunas conclusiones positivas, pero las mismas historias se viene escuchando desde hace mucho tiempo y a la hora de reaccionar no sucede nada concreto, se crea otro parche mágico para crear una sensación de competitividad que no existe en muchos aspectos, haciendo que el deporte se vuelva en algo artificial, mucha de la competitividad de la que se habla en supuestas grandes carreras de los últimos años, se deben en casi su totalidad a que Pirelli fue puesta a cargo de crear un neumático que mezclara las cosas, pero al menos es una solución algo mejor que seguir utilizando DRS que no deja de ser una medida artificial, donde se penaliza a quien está delante para crear un adelantamiento, los pilotos quedan en muchos casos limitados en su capacidad de crear magia desde su toque al volante y deben adherirse a una estrategia  que se decidió en los pits la noche anterior.

Al igual que los coches y sus limitaciones técnicas, el deporte se empeña en poner eventos en lugares que poco aportan a los fans del deporte, tienen poca relación y su único mérito por estar en el campeonato es pagar por encima de lo que pueden circuitos que en general poseen el trazado y conexión con el deporte, que tienen mucho más sentido, nadie se opone a que se busque ganar más dinero o exploren mercados nuevos, pero todo debe encontrar un balance que no trate de borrar el pasado, la historia y desfigure un campeonato que en muchos aspectos solo tiene el título, lo demás parece un circo turístico con poco sentido.

Es cierto que muchos circuitos clásicos son anticuados en la comparación a las obras faraónicas de hoy en día, pero mucho ofrecen esas arenas que permitían a los pilotos ejercer su talento y a la vez ser el continuo vinculo al ilustre pasado del deporte, algo que en este caso parece importarle muy poco a no solo la f1 como organización, sino a la FIA que debería de preservar algo de integridad en un campeonato que ignora su pasado una y otra vez, solo sacándolo a relucir para hacer dinero cuando le conviene, cuando sería mucho más beneficioso para todos, el usarlo como el atractivo principal para seguir atrayendo fans nuevos y viejos.

Si se quiere seguir ofreciendo un show digno, las cosas deben de cambiar de forma muy substancial a todos los niveles, se debe abrir los ojos a la realidad actual, utilizar las nuevas tecnologías para crear el vínculo e interés y dejar de lado las medidas a medias que solo crean confusión, el deporte es complejo pero no necesita de serlo más de lo necesario, los fans y en particular las nuevas generaciones, disponen de una atención reducida y quieren captar lo que ven de forma rápida e íntima, no quieren encender la televisión para deber sentarse con un libro a su lado para poder comprender la mitad de lo que está sucediendo en pista, esa complejidad les aísla, hace extremadamente caro el deporte y va eliminando las conexiones con equipos que no pueden sobrevivir a un deporte que a veces ya no parece de carreras, las medidas no deben contemplar el penalizar a aquellos que hacen bien su trabajo, sino el facilitar la competitividad a todos por igual, las diferencias deben de existir pero siempre permitiendo competir, muchas veces no hay que hacerse la pregunta de si lo que se planea es necesario, sino si es lo correcto.

miércoles, 29 de abril de 2015

Jordan Grand Prix




A lo largo de la historia de la fórmula uno, muchos equipos han pasado por el deporte, varios dejando marcas en su historia con otros solo dejando unas pocas líneas para el recuerdo, el deporte siempre recibió de brazos abiertos a aventureros y emprendedores, no muchos pudieron conseguir sus objetivos, pero pocos causaron una impresión tan favorable en poco tiempo como Jordan, quien también proyectaba una imagen relajada y colorida a la grilla.

Luego de obtener suceso en f3000 entre otras fórmulas inferiores durante los años 80, Eddie Jordan se encontraba pronto para dar el gran salto a la f1, su primer paso fue contratar a Gary Anderson para diseñar el coche y este comenzó los trabajos  con la ayuda de dos colaboradores, Jordan se puso manos a la obra en conseguir el dinero necesario para hacer realidad el sueño.

El contar con el motor Ford fue un gran comienzo, sin embargo uno de sus principales apoyos anteriormente, Camel, le dejaba con rumbo a Benetton, pero el irreprochable Jordan conseguía suplantarlo por 7up, dándole con su color verde otro empuje en su clara identificación con sus raíces Irlandesas, el entusiasmo de Jordan le ayudo a conseguir otros apoyos sin permitirse decaer ante la dificultad del trabajo, la negativa de Kodak por aceptar un coche verde fue nuevamente suplantada por la aceptación de Fuji Film, todo parecía encajar.

Poco antes de fines de 1990, el equipo contrataba a Bertrand Gachot y pocas semanas después sería el turno de Andrea de Cesaris, a pesar de que todo parecía ir de acuerdo a lo planeado, los planes para toda la temporada estaban aparentemente delineados, el dinero llegaba de forma  pausada,  Jordan debió viajar a la primera carrera de 1991 con el mínimo de personal y limitado equipamiento, el presupuesto estaba en su lugar pero aun había trabajo por realizar para asegurar el programa, esto significo de algunos sacrificios, optando por pequeños Bed & Breakfast y rentando un motorhome para ahorrar, el equipo contaba con 41 empleados para el final de su primera temporada, logrando alcanzar la quinta posición en la tabla.

En muchos aspectos, para mucha gente el primer año de Jordan es recordado por el debut de Schumacher en Spa, pero el equipo por medio de duro trabajo se transformó en uno de los con más personalidad y apreciados por los fans, algo que se debe atribuir en gran medida al entusiasmo de Eddie Jordan, la temporada siguiente seria complicada en gran parte por los problemas del motor Yamaha, una asociación con Hart para 1993 comenzaría a dar mejores resultados, pero no sería hasta 1994 en que el equipo recuperaría la forma mostrada en su temporada inicial, igualando el quinto puesto en el campeonato de constructores, Rubens Barrichello daría la primera pole al equipo en Spa y en 1995 arribarían los primeros podios de mano de Barrichello e Irvine en Canadá, detrás de la Ferrari de Jean Alesi.

 A pesar de las buenas actuaciones teniendo en cuenta la diferencia con los equipos por delante, Jordan parecía estar al borde de obtener el triunfo, la primera victoria llegaría en Spa 1998 de manos de Damon Hill y el equipo tuvo una muy buena actuación durante 1999 con Frentzen, con el aumento de los presupuestos y gastos, llego el momento en que Eddie debió pasar el bastón, el equipo pasaría a manos de Midland a principios de 2005 a pesar de que conservaría el nombre por esa temporada y de alguna forma el equipo sigue vivo a través de varias de sus reencarnaciones, Force India en el presente momento.


La actitud del equipo era muy distinta a lo que se contempla hoy día, pero una que se extraña, porque Jordan mostraba que aparte de ser un competidor, también era un equipo divertido que mantenía también presente a los fans, algo que en el ambiente actual es muy difícil de encontrar.

martes, 28 de abril de 2015

Control regulaciones y limites



La f1 lleva tiempo analizándose a sí misma, a pesar que de todas las conclusiones obvias para mejorar la situación del espectáculo y la salud global del deporte, nunca se llegua a decisiones que lleven a algún sitio positivo y regularmente todo queda en la nada o en otro parche momentáneo que se convierte en parte de seguir entorpeciendo lo que en realidad requiere algo de sentido común por el bien de todos.

Para varios 2017 podría ser un punto fundamental en que se pueden introducir algunas medidas que comiencen a poner al deporte en un cierto orden, pero como ya es bien sabido, las decisiones y en particular los acuerdos no son un punto fuerte de la f1, tres años más tarde hay otra posibilidad de implementar nuevas fórmulas y cambios que podrían ser el segundo gran paso a recapturar mucha de la magia perdida de la f1, ya que en 2020 finaliza el acuerdo comercial y esto presentaría el punto ideal en organizarse financieramente hablando, tras haber dado el paso técnico supuesto en 2017, pero todo esto de momento es algo muy en el aire y a pesar de que parece existir una cierta voluntad en producir cambios, por ahora todo es conversación con poco acuerdo como es la costumbre.

Una de las primeras sugerencias siempre recae en un punto que es amplio, mejorar la competencia en pista, muchas veces enceguecidos por reducirlo todo a la aerodinámica, pero si algo puso en evidencia Malasia es que las variables siguen siendo algo que los equipos no gustan cuando no las pueden controlar, los equipos gastan enormes cantidades de dinero en eliminar variables de sus programas, tenerlo todo bajo control, simulando casi todas las variables posibles dentro del tiempo permitido para poder controlarlas o reaccionar en el menor tiempo posible, situaciones climáticas como las que presentaron Malasia, abrieron la puerta a unas posibilidades de unos y les complico la vida a otros, simplemente porque esas variables afectaban  elementos que son difícil de controlar como los neumáticos y el clima, las temperaturas transformaron muchas de las preparaciones de unos en casi obsoletas y a otros les presento con una probabilidad de éxito.

Algunas de las propuestas que se están manejando es hacer el proceso de selección de neumáticos más agresivo para de alguna forma no permitir que los equipos estén demasiados confiados en sus programas y preparativos, haciéndoles estar en una situación de reacción por mucho del fin de semana, sigue siendo una forma artificial de crear espectáculo, pero si algo tiene la fórmula 1 hoy en día es complejidad técnica al punto que muchas de las carreras se deben de mirar con el reglamento  en la mano, siempre se debe tener en cuenta al espectador más casual o no tan metido en la parte técnica del deporte, las carreras deben ser algo fácil de digerir, comprender  y seguir, por otro lado el pedir igualar condiciones en las PU no es una solución, porque limita mucha de la creatividad u opciones, forzando a todos a seguir un camino que lleva más a una fórmula de control más que lo que debería ser, tal vez los neumáticos serian una solución temporal a incrementar la competencia en pista, aunque esto no sería ni algo optimo, permanente y que posiblemente necesitaría de inversión por el proveedor de neumáticos o un cambio de formulación, el punto seria fomentar la estrategia a estar más expuesta.

La naturaleza de los coches es algo que necesita de revisión,  no más complejidad, restricción, que no está llevando a ningún sitio, pero muchas de estas decisiones son complejas y afectan a otras partes del deporte, lo que realmente se necesita es un nuevo enfoque en las regulaciones técnicas que propicien  algo de creatividad, libertad, que sean de atractivo suficiente para conquistar nuevos fabricantes, nuevos auspiciantes, etc, todo esto debe ser contemplado desde el punto de vista que lo haga viable para todos, algo que continuamente es un escoyo, la f1 sigue cambiando su cara, complicando el show y los fans pierden interés, el deporte siempre fue de vínculos entre lugar, máquina y piloto, pero continuamente se tratan de romper esas conexiones, se debe buscar una plataforma que permita comenzar a re construir al deporte y hacerlo nuevamente de carreras en la pista y no un intercambio de información en los boxes o ejecutar el programa de simulaciones, no es necesario eliminar tecnología o ser radicales en nada, solo poner a cada cosa en su sitio y dejar que las carreras vuelvan a ser carreras, tal cual el show se presenta hoy en día, para muchos de los espectadores, lo que ocurre en pista no refleja lo que realmente está sucediendo, generando confusión.

La fórmula 1 tiene muchas tareas pendientes si quiere recuperar su lugar en la cima, debe saber qué es lo que quiere de su producto, que es lo que sus fans quieren y saber cómo brindarlo, crear un programa a corto, mediano y largo plazo sobre los objetivos a conseguir, balancear la tecnología con la complejidad en pista de lo que ofrece su producto en lo visual al espectador, nunca un producto tan potente y con tanto a su favor ha sido manoseado al punto que se está limitando a sí mismo en lo comercial o de popularidad, hay muchos culpables y está en todos el de una vez abrir los ojos para sacar verdadero provecho a algo que trabajado de forma adecuada, no debería de tener los problemas que se empeña en crearse continuamente.

lunes, 27 de abril de 2015

Red Bull en constante lucha





La fórmula 1 siempre fue un deporte que vivió en ciclos de dominio, con el paso del tiempo estos se fueron convirtiendo en ciclos más acentuados, McLaren Honda a fines de los 80 dio paso a Williams quien domino hasta fines de los 90, una breve interrupción puso a McLaren nuevamente en la cima aunque fue una batalla con Ferrari que anunciaba su retorno donde se mantuvo hasta bien entrado el nuevo siglo, durante un tiempo las cosas no fueron demasiado definidas debido en parte a un constante cambio en regulaciones que buscaban competitividad y control de gastos, en uno de esos cambios como suele ocurrir, surge alguien que hace sus tareas de forma más completa y le da una ventaja, así llego a la prominencia el equipo Red Bull que en poco tiempo paso de ser un equipo con imagen divertida y relacionado con diversos deportes extremos, a un equipo que tomo total control de la fórmula 1, las nuevas regulaciones de 2014 dieron un salto a nuevas tecnologías y Mercedes emergió como la nueva potencia en control de la grilla, Red Bull fue uno de los pocos que pudo sacar algo positivo de la temporada, pero en 2015 las cosas van a peor.

Muchos de sus problemas se pueden colocar directamente a una poca competitividad por parte de Renault y su PU, el fabricante francés sigue con considerables problemas y aunque por un breve momento parecía que comenzaba a dar pequeños pasos hacia adelante, en China quedo claro que no era así, tanto Toro Rosso como Red Bull sufriendo de varios problemas que prácticamente le ponen de camino a penalizaciones debido a que deberán utilizar un mayor número de  PU del que está permitido sin entrar en dichas penalizaciones, con las restricciones en los cambios que las unidades pueden recibir en cada temporada incrementando, la capacidad de respuesta de Renault se ve cada vez más limitada, aunque este diga que tiene planes para solventar la mayoría de sus problemas.

Por otro lado es evidente que no todos los problemas están en las PU, Toro Rosso usa las mismas unidades y hasta el momento se podría  decir que han conseguido mejores resultados que Red Bull, algo que pone el foco de atención en la integración de estos nuevos sistemas y que tal vez el chasis de Red Bull sea un poco más complicado en cuanto a la instalación y demandas que pone sobre las PU, algo que de alguna forma no parece afectar en la misma medida al equipo junior, aunque la parte que ninguno puede negar es que el déficit de potencia es notable y se ve muy limitado por los otros problemas que no permiten que el programa avance y así poder extraer sus máximas prestaciones como es deseado.

En Melbourne solo Ricciardo llego a la meta pero en sexta posición, en carrera el RB11 era de media 1.3s más lento, las pruebas de pre temporada habían dejado claro que Renault aun tenia trabajo por hacer, pero con Ferrari dando un salto en su competitividad que también ayuda a Sauber, la situación de Red Bull es cada vez más complicada y la frustración es clara en ambos lados de la colaboración, Renault sigue defendiendo que los números en su data sugieren claramente que las nuevas unidades son mejores, pero Red Bull sigue cuestionando la veracidad de esos números ya que de momento en pista los números no coinciden con lo que Renault dice, en Australia el equipo debió sacrificar algunos aspectos de la preparación del coche debido a la poca colaboración de sus PU, ambos pilotos declarando que las unidades no ofrecían ninguna respuesta lógica a las demandas en los pedales, Renault  por su parte debió reducir la potencia de sus unidades para poder hacer uso efectivo de los complejos sistemas híbridos en conjunto, pero la realidad de la grilla dice que hay más equipos que fabricantes de PU y esto limita las posibilidades.

Renault reconoció que su programa fue algo agresivo para tratar de recortar distancias y esto también complico la situación, pero también reconoció que aún no sabe porque no puede conseguir los resultados en pista basados en su data, las tensiones también mostraron que Renault a pesar de sus problemas podría estar contemplando otras opciones desde el punto de marketing, Red Bull se encuentra en una situación delicada, al igual que McLaren, ambos equipos reconocen que para volver a la cima no se puede ser un equipo dependiente de un fabricante y que se debe establecer una asociación directa como lo está haciendo Honda con McLaren a pesar de todos sus problemas, aquellos que son clientes, deben sacar provecho de sus unidades pero carecen de la colaboración e integración que tienen aquellos que fabrican todo de una forma más uniforme.

Evidentemente ambos lados deben de establecer objetivos a corto, mediano y largo plazo, haciendo todo lo posible para que estos se cumplan, tratando de permanecer el menor tiempo posible estancados en problemas, ambos son culpables de no haber puesto un programa que les pusiera en mejor posición cuando las nuevas regulaciones fueron anunciadas, todos comenzaron con las mismas metas y el mismo tiempo y ambos  poseen las facilidades para hacer un mejor trabajo, posiblemente su éxito en las últimas temporadas no le permitieron focalizar los programas como era debido por lo que en cierta forma ambos lados son culpables o contribuyeron de alguna forma para encontrarse en la situación en que están, con Renault siendo de alguna manera, quien debe cargar con un porcentaje mayor de la falta de competitividad.

Tanto Newey como Abiteboul reconocen que hay problemas que solucionar, pero que también el éxito de varios años a veces hacen que se asuma una posición que la historia dice que no es así, que los equipos no se mantienen en la cima por tiempos demasiado largos, la situación es compleja porque los avances en chasis y el tiempo de implementación de cambios en estos es muy corto en comparación con los que se pueden realizar desde el lado de las PU, Renault decidió contactar con Mario Illien para tener un mejor entendimiento y poner orden a su programa, Red Bull comenzó un programa más íntimo de simulación con Renault para tratar de identificar los problemas .

Las soluciones no son sencillas debido a las limitaciones, tampoco hay opciones fuera de su asociación ya que en el caso de que Renault decida abandonar o comprar un equipo, Red Bull se encontraría en una situación precaria, ser cliente y pelear desde una situación inferior, el poder construir sus propias unidades es algo que esta fuera de su alcance y tiempo, tampoco hay mucho interés de fabricantes nuevos  para entrar a la f1 de momento, la  solución es trabajar en conjunto, encontrar las soluciones, la única opción válida en la actualidad es apoyarse el uno al otro.